viernes, 26 de febrero de 2010

CUENTAME


(A todos los niños desaparecidos-secuestrados durante la dictadura argentina, a Francisco Madariaga Quintela, nieto número 101 recuperado por las Abuelas de Plaza de Mayo, y que ha inspirado el poema; y por supuesto a las Abuelas de plaza de Mayo por su incansable labor en pos de la justicia, la dignidad y la Libertad)

Cuéntame como ha sido tu vida,
Cuéntame de vos
Cuéntame, ¿tengo hermanos?
Cuéntame todo por favor,

Háblame de primaveras
de la herida sin compás
de perdón ni espera,
de las noches en silencio
de las lágrimas de la dignidad,
cuéntame de vosotros,
cuéntame de mamá,
de sus ojos fijos,
de su cara, de su claridad
llamando a la puerta de los sueños,
del significado verdadero
de la palabra libertad,
dime que soy hijo del amor
y no del odio voraz
que devora sin remedio
al más capaz de los hombres.

Cuéntame papá,
borra de mis ojos
tanta infamia,
tantos gritos demenciales,
tanta historia malcriada
tras los pasos criminales
de mis captores resonando
como fusiles y sables
por los pasillos.

Cuéntame de cómo os conocisteis,
de aquella noche de luna
y estrellas entregadas,
de las palabras lindas
que os dijisteis al oído,
dime de cómo pudisteis con ellos,
de cómo a pesar de los llantos
de los grises cuarteles
de la sangre sobre la mesa,
de los apesadumbrados
ojos que parecían derrota
y eran la victoria pura
de los que sabían que la historia
la escriben los valientes,

dime papá,
cuéntame,
háblame de quien soy,
de donde vengo,
dime que soy amor y batalla,
viento puro de condena
que no olvida ni perdona,
que cuenta su historia
para que paguen los culpables,
dime padre,
dime que nunca me olvidaste,
que soy el recuerdo vivo
de aquella mujer rebelde
que entre el humo y los tanques
te robó el corazón,
cuéntame, dime padre
que hay tiempo,
que aun no es tarde
para celebrar la Vida.

Juan Antonio González Molina

13 comentarios:

  1. Un poema muy hermoso para homenajear el sufrimiento que sufrieron y aún sufren tantas familias durante la dictaruda argentina; esperemos que aparezcan todos los franciscos que siguen ocultos.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Con la piel erizada y los ojos empapados, te felicito por este poema tan argentino como algo de tu sangre, como algo de la sangre del mundo en cada uno de los ríos.
    El compromiso que imprimís, la solidaridad y, fundamentalmente, la empatía, son admirables.
    Que placer leerte, Juan Antonio.
    Cariños!

    ResponderEliminar
  3. Emotivo canto de justicia; sublime poema para un encuentro que desmonta la noche y la niebla de la desaparición...un homenaje a la lucha, a la historia; me despido teniendo la seguridad de haber entonado un himno a la fraternidad...

    Nuestro abrazo le habrá de llegar a Francisco; mientras, te envío un abrazo a vos Juan.

    ResponderEliminar
  4. Hola amigo Juan Antonio , tu poema un canto al amor,al sufrimiento y a la paz , muy hermoso y conmovedor tus versos suenan en el aire y los escuchan en el mundo... para que esto que sucedio no pase más en la historia.
    Un abrazo de MA desde Granada .

    ResponderEliminar
  5. ¡Cómo nos estás malacostumbrando con estas cosas tan buenas!

    Me has recordado a Serrat:)

    Se te echaba de menos por aquí.

    Espero que todo bien, un besito

    ResponderEliminar
  6. fuimos y somos desaparecidos
    treinta o cuarenta años antes
    fuimos y somos apariciones
    treinta o cuarenta años de miedo
    y pedacitos de almas que florecen
    aunque heridas no cicatricen
    y ningún caldo nos refresque.
    Donde había hilos
    podrán haber tenazas.

    Celebro el encuentro, el texto de este sitio, celebro cada tanto tengo aire, y celebro, saludos juan antonio!!!!!!
    esta democracia que tenemos en las américas no es un punto de llegada, sino uno de partida!!!!!!

    saludos

    p4

    ResponderEliminar
  7. ¡Precioso Juan Antonio! logras abrazar todos nuestros sentimientos y sensaciones en esta conmovedora historia, que esperamos se sigan repitiendo...

    que padres sigan encontrando a sus hijos, que abuelos puedan por fin acariciar a sus nietos...

    que tu nos sigas regalando tanta belleza en tus poemas.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  8. Que palabra se puede usar para superar lo hermoso, por favor amigos escritores y poetas ayúdenme para describir este poema de Juan.

    ResponderEliminar
  9. precioso, lleno de esperanza y de perdón

    ResponderEliminar
  10. Quién mejor que tú para escribir tan bellas palabras; quién con más sensibilidad, con más empatía, con más sentido de la justicia, con más espíritu de lucha. Quien mejor que tú, Juan Antonio, para poner cada cosa en su sitio, para poner voz a tan triste y a la vez maravillosa realidad. Quién mejor que tú para reparar en cada mínimo, pero no por ello menos importante detalle.

    Porque tú eres capaz de ponerte en la piel de los desgraciados, de los más vulnerables, de los marginados, de los más desfavorecidos, de los pobres, de los vencidos (que no derrotados).

    Como siempre, es todo un placer leerte. Me identifico contigo, por eso y por muchas cosas más, muchas gracias, Juan Antonio.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  11. Siento estremecerse la historia en esta página que construiste para enaltecer ante todo la vida.
    Qué hermoso pasaje al que me llevaron tus letras.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  12. Es increíble como ese poema engloba a todos los niños desaparecidos y por haber en una dictadura. Comprendo profundamente ese sentimiento, en Chile el tema de los DD.HH es fuerte y latente. No se olvida la historia porque ella misma actúa por sí sola para hacer justicia.
    Tengo entendido que varios niños recién nacidos se quedaron sin padres, lo cual, los militares se encargaron de ellos adueñándose. Es así? Si me equivoco dime.
    En mi país no ocurrió aquello, fue más el "limpiamiento del sector contrario al gobierno" que exterminó y exilió a las personas.

    Bueno, esto da para rato.

    No había tenido tiempo en ingresar a tu blog,lo encontré divino. Tienes un talento innato con las palabras. Te emanan del alma... Muy bello.

    Saludos y que estés bien.

    ResponderEliminar

NANAS DE LA CEBOLLA

La cebolla es escarcha
cerrada y pobre.
Escarcha de tus días
y de mis noches.
Hambre y cebolla,
hielo negro y escarcha
grande y redonda.

En la cuna del hambre
mi niño estaba.
Con sangre de cebolla
se amamantaba.
Pero tu sangre,
escarchada de azúcar
cebolla y hambre.

Una mujer morena
resuelta en lunas
se derrama hilo a hilo
sobre la cuna.
Ríete niño
que te traigo la luna
cuando es preciso.

Tu risa me hace libre,
me pone alas.
Soledades me quita,
cárcel me arranca.
Boca que vuela,
corazón que en tus labios
relampaguea.

Es tu risa la espada
más victoriosa,
vencedor de las flores
y las alondras.
Rival del sol.
Porvenir de mis huesos
y de mi amor.

Desperté de ser niño:
nunca despiertes.
Triste llevo la boca:
ríete siempre.
Siempre en la cuna
defendiendo la risa
pluma por pluma.

Al octavo mes ríes
con cinco azahares.
Con cinco diminutas
ferocidades.
Con cinco dientes
como cinco jazmines
adolescentes.

Frontera de los besos
serán mañana,
cuando en la dentadura
sientas un arma.
Sientas un fuego
correr dientes abajo
buscando el centro.

Vuela niño en la doble
luna del pecho:
él, triste de cebolla,
tú satisfecho.
No te derrumbes.
No sepas lo que pasa
ni lo que ocurre.